El trípode de cámara es imprescindible para salir con buena nota de determinadas situaciones. Es un «must» que te dará un plus que todos apreciarán, en situaciones donde la exposición es un poco más larga de lo habitual, donde hay más de una toma, donde queramos ganar nitidez y profundidad de campo en tus fotografías de paisajes , donde tu quieres estar delante de la cámara y no detrás de ella… en este breve post te explicamos alguna de ellas.
Puestas de sol
Los amaneceres y los atardeceres son esas fotos que todos hemos querido captar y que por sorpresa de la mayoría nunca quedan tan bonitas como a los demás. Déjanos que te expliquemos un pequeño truco, sobretodo para aquellas fotos que queramos hacer en “la hora azul”. Estas fotos requieren exposiciones de varios segundos porque ya empezamos a tener poca luz y vamos a necesitar trabajar con velocidades más lentas para que el sensor reciba más luz.
Si tomamos la fotografía sin trípode, saldrá movida… seguro. Por ello ponle un trípode a tu cámara y asegúrate que no se mueva ni un milímetro.
Silk water, rallyes de coches, … vaya elementos en movimiento
Este tipo de fotografías tienen dos tipos de elementos los que están en movimiento y los que están estáticos y estos últimos tienen que quedar perfectamente nítidos.
Cualquier fotografía en la que se incluyan elementos en movimiento, sean de la naturaleza o no, deberán realizarse con trípode de cámara.
Las tan deseadas tomas de “aguas de seda” se tienen que realizar con trípode por que requieren exposiciones más largas. En este caso además te recomendamos un filtro de densidad neutra para evitar sobreexposiciones al tener el sensor abierto mayor tiempo, pero esto ya lo veremos en otro post.
Fotografías en HDR
Se trata de realizar varias tomas con diferentes exposiciones pero con el encuadro exactamente igual, para ello el trípode es imprescindible.
Para conseguir que esos encuadres sean los mismos sin ninguna desviación.
Así conseguiremos imágenes con mayor rango dinámico y un equilibrio cuando hay grandes contrastes de luz.
Fotografía Nocturna
La fotografía nocturna es una de esas ramas de la fotografía en la que no hay duda de la necesidad de un trípode de cámara, porque en las situaciones donde hay poca luz, tendremos que utilizar un ISO alto, aperturas amplias y velocidades lentas.
Con estas premisas el sensor recibirá la mayor cantidad de luz posible.
La cámara debe mantenerse inmóvil en estas capturas así que si hablamos de velocidad lenta, a estas alturas de este texto ya habrás deducido que significa que necesitamos un punto de apoyo o si hablamos con propiedad : un trípode de cámara.
Si vas a tomar la foto en un entorno urbano donde por ejemplo tengamos una serie de luces que estén en movimiento te dará resultados increíbles realizando una exposición un poco prolongada, capturarás estelas de luz.
Time Lapse, multi-exposiciones, clonaciones, …
El Timelapse es una técnica fotográfica que consiste en capturar a través de imágenes sucesos que, normalmente, acontecen a velocidades muy lentas.
Se trata de realizar las fotografías con un intervalo de tiempo determinado entre una toma y otra. Con esto conseguiremos representar una situación en un período de tiempo mucho más breve que el real.
Seguro que al ver alguno te has quedado hipnotizado.
Para hacer estas tomas la cámara tiene que estar inmóvil, o sea, otra vez, necesitas un trípode de cámara.
Y también te gustan las clonaciones? El trípode es un requisito imprescindible si lo que vas a hacer son multiexposiciones.
Las clonaciones son una serie de capturas con un encuadre idéntico en las que el individuo va cambiando de posición para después poder editar “ apilando” esas tomas y conseguir el efecto de clonación.
Quieres salir en la foto?
Con un trípode solventas la situación sin mayor problema. En combinación con el temporizador de la cámara resuelves la situación en un plis plas.
Preparas la toma colocando tu cámara en un trípode, configuras el temporizador, disparas y te colocas enfrente de la cámara con el resto del grupo o tu solo si son autorretratos.
Claro está que también puedes utilizar disparadores inalámbricos para tu cámara, eso también ayudaría 😉
Fotografía macro
Para la fotografia macro al trabajar con una profundidad de campo muy escasa, si quieres lograr un efoque preciso necesitaras si o si un trípode para tu cámara. La estabilidad que te va a dar este accesorio es fundamental, cualquier vibración haria que tu toma no fuera buena.
Fotografía de Producto
Cuando hablamos de fotografía de producto o lo que antes llamábamos bodegón, el trípode tiene una función como en los demás casos de evitar las vibraciones a la hora de disparar y una función super básica de facilitarnos el trabajo. Con un trípode de cámara vamos a trabajar de una manera mucho más cómoda.
Nos permitirá hacer variaciones en la composición, en la iluminación, … sin necesidad de volver a recolocarnos, con la toma ya preestablecida.
Como ya sabéis en fotografía publicitaria de producto en muchos casos también necesitareis diferentes tomas del mismo encuadre, con diferentes iluminaciones para luego editar y conseguir la foto final.
En este caso, los más pros seguro que estáis pensando más en los trípodes de columna como los de Cambo… ya lo sabemos esto es lo más! Por eso si queréis también os lo podemos ofrecer!
Teleobjetivos
Si quieres utilizar un teleobjetivo, al tener una distancia focal más larga un teleobjetivo va a multiplicar cualquier vibración causada en la cámara, incluso la más mínima.
La solución: fácil! Usar un trípode de cámara. Ganaremos estabilidad y obtendremos imágenes más nítidas.
Vídeo
Aquí se nos cuela el vídeo.
A pesar de los potentes estabilizadores que incorporan hoy en dia las cámaras, no hay como un trípode… sobre todo si lo que quieres es grabarte a ti mismo 😉.
Esperamos que este post te haya sido de ayuda. Hasta la próxima!